COMUNICADO
DE PRENSA
El último Fallo de la
Procuraduría Provincial de Girardot, del 25
de enero, inhabilita y sanciona con 14 años en primera instancia al ex
alcalde Gentil Gómez. En este proceso aparezco como el denunciante, por tal razón me permito precisar
lo siguiente:
En el año 2012 cuando
empezaba su mandato el ex alcalde, la percepción e impresión que se tenía de su
actuar, me llevaba a interpretar que
algunas decisiones evidenciaban inexperiencia y/o desconocimiento administrativo; y desde el informativo que dirigía en el
espacio de Tolima TV, se advertía que, las decisiones que en su momento se
tomaban, como el nombramiento de
funcionarios y contratistas, era
exagerado y solamente se hacía para complacer el apetito burocrático de los
aliados que ayudaron a conseguir el triunfo de la alcaldía del periodo
2012-2015. Desafortunadamente en esa
época, el alcalde a su buen entender, menospreció, dio menor valor, o
simplemente no le dio la importancia que merecían dichos comentarios,
advertencias o análisis periodísticos, razón
por la cual, tomé la decisión de presentar la queja ante la Procuraduría para
que se investigara el proceder del alcalde, caso que después de 5 años del
proceso, falla en primera instancia imponiéndole sanción disciplinaria consistente en destitución e inhabilidad
general por el terminó de 14 años.
Ha sido costumbre en las
campañas que los candidatos asuman compromisos burocráticos con quienes van a
respaldarlo para lograr el triunfo, y entre otros, está el nombramiento de sus recomendados en cargos públicos con
órdenes de prestación de servicios o contratos de asesorías.
Pero es deber del periodista
no sólo informar y dar a conocer la noticia, sino ser veedor en las actuaciones
administrativas, y en nuestro caso advertimos que se estaba cometiendo un acto
de ligereza administrativa, el cual era importante corregir para evitar
sanciones en una investigación disciplinaria.
A toda denuncia cimentada en
soportes serios y fundamentados que cualquier periodista haga a través de los
medios, los entes de control están en la obligación de investigarla de oficio;
pero si esto no se da, el periodista como cualquier ciudadano de bien, puede presentar
de forma directa la queja correspondiente.
Como periodista, he ejercido
mi profesión con vocación y entrega, sin
odios y sin apasionamientos sectarios, aplicando los principios del servicio
social y el bien comunitario, no soy enemigo de ningún alcalde, funcionario o
líder político; el periodismo se ejerce, no para atacar ni tumbar mandatarios o
funcionarios de turno, por el contrario, para ayudar a realizar el control social,
hacer contrapoder con el único ánimo de que Ellos puedan ver, lo bueno pero
también los desaciertos; seguiré actuando según mi criterio, trabajando en bien
de la comunidad, resaltando y difundiendo todo aquello que, a mi buen entender crea
que es benéfico, y también denunciando irregularidades,
pero sobre todo advirtiendo errores para su corrección; de ninguna manera es mi
propósito convertirme en una fuente perturbadora, no solo del progreso y el
desarrollo de Melgar, sino de la
conciencia individual de cualquiera de sus habitantes.
Oscar Alberto Noreña Gómez
Periodista.
Director
Informativo Notiregional del Oriente.
