miércoles, 6 de abril de 2016

Boquerón un corregimiento de Icononzo, totalmente abandonado.


Cuando el actual alcalde de Icononzo Jorge García Orjuela era gobernador del departamento y Nacho Jiménez alcalde del “Balcón del Oriente”, se gestionó por la Gobernación la compra de un terreno en el corregimiento de Boquerón para el traslado de la Institución Educativa Técnica Panamericana Satélite Boquerón, que cumpliera con los requisitos y especialmente que fuera campestre y tuviera espacio suficiente para las aulas y la recreación y además que alcanzara los recursos asignados de $ 260 millones. Así las cosas, se hizo la compra y escrituración a nombre del municipio, dos lotes a un costo de 65 millones de pesos; el valor restante sería destinado para el movimiento de tierras, para terracear y construir dos aulas y la batería sanitaria.

Pero quedó pendiente la construcción de los muros de contención para mitigar el riesgo de deslizamiento de tierras en la parte alta del terreno y los muros de la parte baja contiguo a la carretera de acceso. Había que gestionar ante los entes, aprovechando la ley 21, para que se asignaran los recursos destinados a la terminación de las instalaciones incluyendo el polideportivo. Han pasado los años y por falta de recursos la obra quedó abandonada; hoy en día las aulas están deterioradas por la maleza y la caída de piedras, mientras en las administraciones departamental y municipal reina un silencio absoluto.

La Institución Educativa Panamericana ha venido contando con unas instalaciones reducidas e incómodas donde en años anteriores y antes de la doble calzada tenía inscritos 220 alumnos y hoy solamente 180 de primaria y bachillerado, con una planta de personal de 6 maestros para bachillerato y 5 de primaria, 1 directivo docente y una empleada administrativa. Esta institución en la actualidad ocupa en el listado de los mejores colegios del Tolima el puesto 41, y en el resultado de las pruebas Ser Pilo Paga logró ubicar un alumno que actualmente está en la Universidad de la Salle y 4 más con puntajes sobresalientes.

Es tan sobresaliente la educación en esta institución que a pesar de sus inconvenientes los padres de familia de municipios vecinos como Pandi parte baja, Tibacuy, veredas como el Salero de Melgar llevan sus hijos para que reciban la formación académica en Boquerón; de Chinauta llega todos los días un bus financiado por la empresa Expreso Bolivariano y trae 40 estudiantes del sector.

Boquerón corregimiento del municipio de Icononzo no tiene puesto de salud y en donde alguna vez funcionó, está viviendo una persona con discapacidad que no han podido ser reubicada y por esta razón no hay asistencia en salud, pero tampoco pueden usar la instalación y los infantes están sin la guardería. Pero como si lo anterior fuera poco, el puesto de policía que había sido construido con aportes de la comunidad y el municipio, cuando llegó la concesión de la doble calzada se negoció las instalaciones y le pagó al Fondo Rotatorio de la Policía, ahora que la comunidad ha reclamado por las instalaciones y el regreso de la policía al corregimiento, la misma policía les ha dicho que tienen que construir la sedes para que la policía vuelva, pero sin utilizar los recursos recibidos por la venta del inmueble que era de la comunidad.

La comunidad espera de su alcalde Jorge García Orjuela la terminación de la sede nueva para el colegio, la construcción del puesto de salud, la devolución de los dineros cobrados por el Fondo Rotatorio de la Policía o la construcción por ellos del nuevo puesto de policía, la instalación de los reductores de velocidad para evitar accidentes en la nueva calzada, la canalización de la quebrada que atraviesa las instalaciones del actual colegio y la sede para la primera infancia.

Pareciera que a las administraciones municipales que ha tenido Icononzo, solo les ha interesado Boquerón en campaña política, y el resto de tiempo estuvieran empeñadas en mostrar sobre la carretera panamericana un cuadro de abandono, desigualdad y desidia, que nada tiene para enorgullecerse, todo lo contrario: ¡Vergüenza debería darles!